Distinto a lo que la mayoría supone ser “jefe” es un trabajo difícil al que muchas veces accedemos sin conocer que debemos hacer, ni cómo debemos hacerlo…Es tan complejo el tema que necesitamos el tiempo, el conocimiento y la dedicación suficiente para estar a tono con la exigencia que requiere la posición.Pero más allá de todo, hoy quería referirme en particular al cuidado, a las maneras, a las buenas formas que desplegamos en la búsqueda de lograr el objetivo de que nuestro equipo sea mejor, pueda modificar conductas, e inclusive, pueda adquirir nuevas competencias para resolver nuevos problemas.Por eso el título de ésta nota “…Corrige suavemente, recompensa fuertemente…”.Corregir suavemente, no necesariamente es ser o mostrarse blando, es ser o estar inteligentemente orientado a lograr el objetivo de modificar a favor del buen resultado.Cuidando las buenas formas para ser bien recibido, procurando el clima y la comunicación necesaria para corregir desde el convencimiento.Recompensando fuertemente como llave que genere un clima propicio para que se repitan los aciertos, donde la organización procure constantemente volver a buscar, a través de nuevos aciertos, nuevas recompensas.Pienso y siento que ambos casos, si esto se diera al revés, los resultados serían eventualmente los deseados, en lugar de definitivamente los buscados.Para terminar le pregunto…si Ud. no fuera el jefe, ¿Cómo le gustaría que se relacionen con Ud. cuando incurra en aciertos o desaciertos???Alejandro R. Bogado