Hay información que diariamente es solicitada por nuestros clientes, por ejemplo, al teléfono, ¿cuáles son los horarios de atención?, en el mostrador, ¿cuál es la garantía de un producto? o simplemente, ¿cuál es la financiación vigente para tarjetas de crédito?...Siempre me pregunto, si las preguntas son siempre las mismas, ¿Por qué no conocemos las respuestas?Supongo que deberíamos pensar en estandarizar todas esas preguntas con sus respectivas respuestas, e inclusive podríamos pensar en subir esas “preguntas frecuentes” a nuestra página web.Y si el mismo pensamiento lo trasladamos al conocimiento de mis competidores, (cuando definitivamente nos pusimos de acuerdo cuales son nuestros competidores) ¿no sería bueno compartir la información acerca de sus características?… esto con seguridad nos servirá para evitar comparaciones, bien o mal intencionadas, de parte de algún cliente que quiera obtener un beneficio producto de nuestro desconocimiento.Si las respuestas sólo la tiene parte del equipo tenemos la mitad del trabajo logrado, lo siguiente entonces, será que esa información la tengan y la conozcan todosY si todas las respuestas no las tiene nadie, simplemente tendremos que hacer lo de siempre, poner manos en la obra, comenzar por registrar las preguntas que se repiten, buscar las respuestas adecuadas y compartirlas con todo el equipo.Debemos reflexionar todos juntos que, en nuestro comercio, los clientes no eligen a quien hacer las preguntas, entienden que cualquiera que está en la atención las puede responder, porque lamentablemente, si no las encuentran, las irán a buscar a otro lugar.Alejandro Bogado