Uno pensaba que las duchas eran simplemente unos artefactos, realmente parece que nos quedábamos cortos con la descripción.
Duchas con cromoterapia: cada color puede lograr efectos en las células.
Cuando uno pensaba que las duchas eran simplemente unos artefactos que se encargaban de distribuir el flujo de agua de una forma agradable que cubra nuestro cuerpo y brindarnos un agradable baño, realmente parece que nos quedábamos cortos con la descripción.
Cuando uno pensaba que las duchas eran simplemente unos artefactos que se encargaban de distribuir el flujo de agua de una forma agradable que cubra nuestro cuerpo y brindarnos un agradable baño, realmente parece que nos quedábamos cortos con la descripción. Al tiempo que la tecnología avanza, nuevas características que refinan las personalidades de cada uno de los elementos que forman parte de nuestro hogar, parecen salir a la superficie redistribuyendo las cartas sobre la mesa de una nueva manera permitiendo jugar un nuevo juego, no solo económico, sino también decorativo.
Las duchas no son solo duchas tal cual las conocimos cuando crecimos. Han cambiado y ahora tienen muchas nuevas prestaciones que las llevan a un nuevo nivel.
Las duchas con cromoterapia tratan enfermedades físicas y trastornos emocionales. La cromoterapia no tiene ninguna contraindicación porque no es invasiva. Cada sesión tiene una duración de 15 minutos.
La cromoterapia es una terapia alternativa que consiste en utilizar el color para tratar enfermedades físicas y trastornos emocionales. Los colores pueden convertirse en instrumentos terapéuticos por sí mismos ya que tienen la capacidad de calmar, inspirar y equilibrar nuestras percepciones y organismo.
La terapia del color está posiblemente arraigada y ligada a la Ayurveda, una antigua forma de medicina practicada en la India por miles de años. Otras raíces históricas la atribuyen a China y a la antigua cultura egipcia. En la medicina tradicional China, cada órgano está asociado con un color.
La cromoterapia o fototerapia como se le llama ahora, es la utilización de luces, en este caso, luces de diodo, que son las mismas que utilizamos para iluminar pero que profundizan muy bien en la piel y se las utiliza para determinadas patologías.
La luz roja estimula la producción de colágeno y del mismo modo nos ayuda al drenaje de los tejidos, entonces podemos utilizarla en casos de traumatismos para desinflamar. Podemos emplearla también en estéticas para rejuvenecimiento, para hacer levantamiento de la piel.
Otro tipo de luz es la amarilla. Actúa especialmente a nivel de los melanocitos que son los que dan el color a las células, entonces se utiliza en pacientes que tienen manchas.
Por último, hay un tipo de luz que es la azul, que mata las bacterias que producen el acné.