En las cocinas, en los cuartos de los chicos, en el playroom, las superficies tratadas con esmalte para pizarrones ganan terreno en las casas modernas incorporando un espacio que, además de vestir una pared o un rincón, generan situaciones de juego y de decoraciones variadas.Pero ¿pensaste en sumar una pizarra a tu baño?¿Por qué no? El esmalte para pizarrón es resistente, muy lavable y viene en varios colores. Una lata de un litro ronda los 200 pesos y hay varias marcas en el mercado para elegir. Incluso, si la superficie a tratar es muy pequeña, el producto viene en presentaciones de medio litro o incluso de un cuarto de litro.PREPARADOS, LISTOS…Aplicar el esmalte no es demasiado complejo. Antes de comenzar, hay que alisar la superficie, como con cualquier otro producto, limpiarla y reparar cualquier falla. Hay quienes recomiendan aplicar además una capa selladora multiusos para componer un fondo apto.Luego, llega el turno del esmalte. Es importante desplegar el producto con delicadeza para lograr una textura homogénea y sin irregularidades. Lo ideal es aplicar por lo menos dos manos de esmalte (lijando suavemente entre la primera y la segunda). Los expertos recomiendan aplicar las capas en sentido cruzado: si la primera mano usaste trazos verticales, en la segunda es mejor hacerlo con movimientos horizontales. El esmalte se puede usar además sobre madera, metal o PVC.PAREDES, BOTIQUÍN Y UNA PUERTAYa con la técnica incorporada, el baño se presenta como un enorme papel en blanco sobre el que se puede imaginar. Una pared puede transformarse en pizarrón, pero también la pared del vanitory. La puerta de acceso, un detalle debajo de la bacha o el botiquín. ¿Por qué no el marco del espejo? Y para los realmente fanáticos ¡todo el toilette!Fuente: FV Inspiración