Aprovechá el verano y llená de playa y mar cada rincón de tu casa. Con algunos detalles y sin grandes presupuestos, podés componer un baño playero en el que relajarte todo el resto del año.Primero, los colores. Tanto la gama de los tonos marinos como aquellos más neutros (beige, off white, amarillos claros) mandan en este universo. No es necesario que pintes todo el espacio aunque siempre es bueno renovar la pintura si ha llegado el momento. Los colores y el mar Aquí, podés elegir una cortina de ducha a rayas horizontales azul marino, venecitas celestes (incluso podés recurrir a azulejos adhesivos) o un simple machimbre de tablas con acabado rústico sobre la bacha.Si preferís recursos más simples, cuadros, algunos objetos bien elegidos y esos caracoles que traés, pueden ser un excelente segundo paso. Incluso estrellas de mar de las que venden en las casas de recuerdos son un elemento sencillo que marca su presencia.Para aquellos que se sienten habilidosos, las posibilidades son muchas. Marcos de todos los tamaños y bastidores se consiguen en madereras y en plataformas de venta online. Solo hay que animarse con un poco de pintura y dejarse llevar. Y si los resultados son buenos, ¿por qué no un espejo lleno de caracoles? Una tercera posibilidad son dos o tres estantes blancos que ofrecen muchas posibilidades para imaginar un rincón marino.Además, permite acomodar esas pequeñas “cositas” que siempre dan vueltas por la mesada del baño. Dos objetivos en un único recurso.LA GRIFERÍA IDEAL PARA ESTE ESTILOTemple, el juego para lavatorio de pared, se adapta perfectamente a este estilo joven y fresco. Se puede colocar en la pared o sobre la mesada. Y si, sumás todo el juego de accesorios y la ducha (hay variedad para elegir modelos y diseños) ¡tu baño será la envidia de todos!Fuente: FV Inspiración