Los edificios consumen más del 33% de la energía total y generan emisiones de gases a la atmósfera que aceleran el cambio climático.
La eficiencia energética exige un pensamiento eficiente de los profesionales de la construcción
El Consejo Profesional de Ingeniería Civil - CPIC - pone énfasis en la de eficiencia energética como temática central, haciendo hincapié en el pensamiento eficiente al que se deben adaptar los profesionales, en cuanto a la incorporación de materiales térmicos y tecnologías como la captación de energía solar térmica para agua caliente, criterios de orientación y buena construcción. Considerando esta temática como clave para este año, el 7 de septiembre el CPIC llevará adelante el Seminario CPIC 2018 sobre Eficiencia Energética.
Los edificios consumen más del 33% de la energía total y generan emisiones de gases a la atmósfera que aceleran el cambio climático. El Consejo Profesional de Ingeniería Civil - CPIC - pone énfasis en la de eficiencia energética como temática central, haciendo hincapié en el pensamiento eficiente al que se deben adaptar los profesionales, en cuanto a la incorporación de materiales térmicos y tecnologías como la captación de energía solar térmica para agua caliente, criterios de orientación y buena construcción. Considerando esta temática como clave para este año, el 7 de septiembre el CPIC llevará adelante el Seminario CPIC 2018 sobre Eficiencia Energética.Los edificios consumen cerca del 33% de la energía del planeta y emiten gases a la atmósfera que aceleran el cambio climático, lo que se traduce año tras año en un ascenso de las temperaturas promedio. Es un fenómeno global pero debe resolverse con una visión local. El año pasado hubo un primer avance en Argentina en lo que refiere a energías renovables, con el inicio de las licitaciones públicas de parques solares y eólicos, políticas de distribución de energía y el surgimiento de decenas de empresas que se encuentran desarrollando localmente estas tecnologías. Pero la energía más barata es aquella que no necesitamos consumir y así como 2017 fue anunciado oficialmente por el Consejo Profesional de Ingeniería Civil –CPIC- como “El año de las energías renovables”, éste y los siguientes proponemos hablar de una cruzada anterior: “El año de la Eficiencia Energética”. En este sentido, el CPIC organizará el 7 de septiembre, el Seminario CPIC 2018 sobre Eficiencia Energética, totalmente dedicado a esta materia siempre pendiente. Todavía hay mucho que hacer desde todos los sectores: los profesionales de la construcción tienen todas las herramientas a disposición y a precios cada vez más democráticos de materiales térmicos y tecnologías como la captación de energía solar térmica para agua caliente, que aprovecha las privilegiadas condiciones de sol en algunas zonas de nuestro país. Pero deben entrenarse en un pensamiento eficiente, con soluciones que empiezan con medidas más simples, como implementar paredes y techos claros en vez de oscuros, ventanas bien orientadas y con parasoles, persianas o láminas de control solar al oeste o doble vidriado al sur. También las políticas públicas deben logran un cambio de mentalidad, apuntando a la base en la cadena de valor, con medidas de incentivo y penalidad claras y bien instrumentadas a profesionales proyectistas y constructores, así como también a desarrolladores inmobiliarios. El etiquetado es un paso adelante, ya que permite calificar la eficiencia mediante un sistema comparativo que se compone de siete clases de eficiencia identificadas por letras, y es aplicado a electrodomésticos, materiales y ahora también se está lanzando para ventanas.Asimismo, las viviendas deberían estar etiquetadas, como en otros países de la región, dando a conocer cuáles son las que consumen y contaminan menos. Para ello, se deben implementar políticas de medición de eficiencia energética, de manera que una persona podrá conocer cuánta energía consume su casa de la misma forma que un comprador puede saber cuánto consumirá su auto. Solo se puede controlar lo que se puede medir y debe hacerse con un método simple. Las viviendas etiquetadas darían impulso a los desarrollos inmobiliarios sostenibles, debido a que los empresarios podrían trasladar el valor extra de la construcción sustentable al consumidor, que a la vez tendría una mayor percepción del valor de este tipo de viviendas. A su vez, se ofrece al consumidor la posibilidad de invertir en una casa que se amortizará en pocos años, con ahorro en tarifas, y que tendrá una plusvalía en la venta futura.Todos estos temas tendrán lugar en el Seminario CPIC 2018 sobre Eficiencia Energética el próximo 7 de septiembre en el Centro Cultural Borges de la Ciudad de Buenos Aires.