Lo que permanece más allá de las modas. Lo que atraviesa los tiempos y los espacios. Aquello que otros imitan sin capturar del todo su alma.
El toilette estilo clásico: griferías, colores y terminaciones
La caja requiere su atención. De piso a techo, hay materiales más frecuentes que otros y es importante elegir con cuidado. Los pisos de maderas (parquet, listones, flotantes) son un clásico de este clásico, pero un damero en blanco y negro, cerámicos neutros o incluso con diagramas al tono pueden sumarse a una composición exitosa.
Lo que permanece más allá de las modas. Lo que atraviesa los tiempos y los espacios. Aquello que otros imitan sin capturar del todo su alma. Eso es un clásico. Y, por eso, un clásico es una apuesta que siempre gana. Si querés un toilette siempre actual, apostá por estos toques tradicionales.La caja requiere su atención. De piso a techo, hay materiales más frecuentes que otros y es importante elegir con cuidado. Los pisos de maderas (parquet, listones, flotantes) son un clásico de este clásico, pero un damero en blanco y negro, cerámicos neutros o incluso con diagramas al tono pueden sumarse a una composición exitosa.Por su parte, las paredes oscuras ayudan a definir el estilo y si hubiera molduras (antiguas o incorporadas ad hoc) sería un gran punto a favor. Para los muros claros, un zócalo alto de materiales opuestos (ladrillos, madera, azulejos) delimita el sector superior sobre el que se pueden aplicar cuadros o espejos. Una última opción es la del papel: rayas verticales o estampados se imponen en un toilette clásico.La grifería también es determinante. Por eso te sugerimos el modelo Alesia que suma a este estilo un perfume actual con su estructura de líneas curvas y remates rectos, aunque si la apuesta hace eje en lo sinuoso y sugerente, nada mejor que el Alesia Lever. En cambio, si se busca acentuar lo tradicional, el modelo Vermont pone reminiscencias antiguas que no desentonan. Una tercera opción es Margot: de presencia elegante y discreta no disputará protagonismo si se decidió lucir un espejo imponente. Animate a volver a las fuentes y tendrás un toilette para siempre.Protagonista indiscutidos son, aquí, los espejos y los artefactos de iluminación. Si bien es frecuente espejar toda una pared, son preferibles los elementos circulares o rectangulares con marco imponente. Los hay dorados a la hoja y laqueados en blanco o en negro. Para iluminar, siempre una araña será la vedette incluso si aparece acompañada por apliques con pantallas claras.En un toilette clásico es recomendable olvidarse de los estantes, muebles y vanitorys. Las paredes despejadas pueden sumar cuadros de diversos tamaños enmarcados en blanco, negro o dorado. Y poco más. Eso sí: una planta discreta, una orquídea si hay luz suficiente, o algunas flores pequeñas son un detalle elegante y bienvenido.Por último, artefactos clásicos, siempre blancos, de líneas tradicionales. Si la bacha tiene pie, mucho mejor. Algunos apuestan por combinar lo de siempre con algún toque moderno: un inodono de líneas contemporáneas puede funcionar, aunque hay que ser cuidadosos al momento de elegir para no quebrar el lenguaje general.