En febrero el deterioro sectorial llegó a todos los indicadores; en marzo la cuarentena los desplomó.
Informe Económico
En febrero el Indicador Sintético de Actividad de la Construcción (ISAC) corregido por estacionalidad mostró un leve rebote de 0,3% mensual.
Informe EconómicoEn febrero el deterioro sectorial llegó a todos los indicadores; en marzo la cuarentena los desplomó. En febrero el Indicador Sintético de Actividad de la Construcción (ISAC) corregido por estacionalidad mostró un leve rebote de 0,3% mensual. Esta variación resultó mínima comparada con el comportamiento que había anticipado un mes atrás el Índice Construya (IC; que había subido 9,4% mensual). Y en la comparación interanual, el ISAC registró una caída de 22,1%, cumpliendo dieciocho meses consecutivos en retracción. Un anticipo de los efectos del Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio (ASPO) sobre los despachos al mercado interno de insumos para obras residenciales, lo aportó el IC del Grupo Construya. En marzo la serie desestacionalizada exhibió una contracción de 31,4% con relación a febrero. Y si compara con el máximo alcanzado en noviembre de 2017, el IC registró una contracción de 51,6%. En el caso particular del cemento Portland los guarismos fueron más negativos aún. El nivel de empleo formal en la construcción continuó acompañando el proceso recesivo. Con datos a enero de 2020, la cantidad de puestos de trabajo formales medidos por el IERIC cayó hasta 346.311 y marcó el mínimo de la década (2011-2020). Por su parte, en febrero los permisos de construcción de obras privadas se sumaron al proceso contractivo sectorial. Luego de varios meses en recuperación, el deterioro del escenario general llevó nuevamente a los actores sectoriales a desensillar hasta que aclare.En febrero el ISAC corregido por estacionalidad mostró un leve rebote de 0,3% mensual. Esta variación resultó mínima comparada con el comportamiento que había anticipado un mes atrás el Índice Construya (que había subido 9,4% mensual). Y en la comparación interanual, el ISAC registró una caída de 22,1%, cumpliendo dieciocho meses consecutivos en retracción. En el primer bimestre de 2020 el ISAC quedó ubicado 17,8% por debajo del primer bimestre de 2019.Asimismo, cabe señalar que el INDEC revisó los números de la serie desestacionalizada correspondientes a diciembre de 2019 y enero de 2020. Lo que hasta el mes pasado eran una baja de 7,9% y una suba de 0,4% mensual, se convirtieron en caídas de 7,3% y 0,4%, respectivamente. De este modo, el ISAC de enero se ubicó 0,2% debajo de lo que señalamos el mes pasado. En ausencia de estas modificaciones, el dato correspondiente a febrero de 2020 hubiera resultado apenas 0,1% superior al del mes previo, y no 0,3% mayor. Igualmente, todo esto se volverá irrelevante cuando se publique la cifra correspondiente a marzo de 2020, que será la primera en mostrar el impacto del Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio (ASPO), impuesto para morigerar los efectos de la pandemia del coronavirus.Un anticipo de los efectos del ASPO sobre los despachos al mercado interno de insumos para obras residenciales, lo aportó el IC del Grupo Construya. En marzo la serie desestacionalizada exhibió una contracción de 31,4% con relación a febrero. En tanto, al comparar con marzo de 2019, la serie con estacionalidad mostró un desplome de 39,5%. En ambos casos, fueron las mayores caídas desde que comenzó a medirse el IC en junio de 2002. Y si compara con el máximo alcanzado en noviembre de 2017, el IC registró una contracción de 51,6%.En el caso particular del cemento Portland, que funciona como termómetro sectorial en nuestro país, los guarismos correspondientes a marzo y al primer trimestre del año fueron más negativos aún. En marzo se entregaron al mercado interno sólo 502,5 mil toneladas de cemento, es decir 46,5% menos que en marzo de 2019. Con estos guarismos, el primer trimestre cerró con un total despachado de 1,935 millones de toneladas, lo que arrojó una disminución de 29,3% interanual (-800 mil toneladas).Puesto en una perspectiva histórica, entre los últimos 40 marzos, es importante señalar que el volumen despachado en marzo de 2020 se ubicó en el puesto 24. Hay que remontarse hasta marzo de 2004 (cuando la economía argentina y el sector de la construcción estaban comenzando a recuperarse de la depresión 1999-2002), para encontrar un nivel similar (518 mil toneladas).Retomando el análisis del ISAC, entre enero y febrero del corriente año el rebote de la serie desestacionalizada se explicó por las recuperaciones de las entregas de cinco insumos que más que compensaron las retracciones de los demás productos. Las subas se observaron en: pisos y revestimientos cerámicos (+14,0%), ladrillos huecos (+7,9%), pinturas para construcción (+5,0%), cales (+0,3%) y ‘vidrio plano para construcción, tubos de acero sin costura y grifería’ (+0,3%). Del otro lado del eje se ubicaron: hormigón elaborado (-0,7%), cemento Portland (-0,7%), yeso (-3,0%), placas de yeso (-6,2%), mosaicos graníticos y calcáreos (-6,7%), asfalto (-6,8%), artículos sanitarios de cerámica (-7,1%) y hierro redondo y acero para construcción (-12,3%).En la comparación interanual, sólo los pisos y revestimientos cerámicos registraron mayores despachos (+20,3%). En los demás casos, las bajas fueron de: ladrillos huecos (-0,6%), yeso (-9,4%), ‘vidrio plano para construcción, tubos de acero sin costura y grifería’ (-10,3%), pinturas para construcción (-11,5%), cemento en bolsa (-14,6%), cales (-16,5%), placas de yeso (-23,8%), artículos sanitarios de cerámica (-23,9%), hierro redondo y acero para construcción (-28,4%), cemento granel (-38,6%), mosaicos graníticos y calcáreos (-38,7%), hormigón elaborado (-52,6%), y asfalto (-69,6%).El nivel de empleo formal en la construcción continuó acompañando el proceso recesivo. Con datos a enero de 2020, la cantidad de puestos de trabajo formales medidos por el IERIC cayó hasta 346.311 y marcó el mínimo de la década (2011-2020). En la comparación interanual se observó una caída de 14,5%, que llegó a -20,0% con respecto al pico alcanzado en noviembre de 2017. En términos absolutos, se perdieron 58,5 mil puestos de trabajo formales en el sector en relación a enero de 2019 y 86,5 mil con respecto a noviembre de 2017.En febrero los permisos de construcción de obras privadas se sumaron al proceso contractivo sectorial. Luego de varios meses en recuperación, el deterioro del escenario general llevó nuevamente a los actores sectoriales a desensillar hasta que aclare. El indicador adelantado de la actividad de la construcción privada registró 557,7 mil metros cuadrados autorizados en el conjunto de 60 municipios relevados por el INDEC. La comparación interanual arrojó una contracción de 18,7% (-128,0 mil metros cuadrados).Con estos guarismos, en el primer bimestre se aprobaron 1,19 millones de metros cuadrados, es decir 6,4% menos que en enero-febrero de 2019 (-80,7 mil metros cuadrados).Lic. Pablo A. LaraDirector de ESTRATECO Consultores